EXPRESSO fue descubierto por mi abuelo, Jaime O’Shanahan Bravo de Laguna en 1972 en una feria en Alemania. Se las trajo algunas carretillas para Canarias y aquí el primero que las compró fue la empresa 7UP. Seragri, la empresa de mi abuelo, empezó a dárselas a probar a las distintas empresas de transporte de bebidas, alimentación e incluso a los agricultores, clientes principales de Seragri en aquel momento. Todos ellos quedaron encantados con su ligereza y capacidad de carga.
Más adelante fue mi padre, Jaime O’Shanahan Juan quien decidió dedicarse en exclusiva a las carretillas Expresso abriendo Sitramo’s en 1992 convirtiéndose en el importador exclusivo para las Islas Canarias de todos los productos Expresso y ofreciendo servicio de reparación oficial para nuestras carretillas. Fue entonces cuando abrió dos tiendas para atender a los clientes de forma más personalizada una en Gran Canaria y otra en Tenerife y extendiendo su venta a zonas tan remotas como a la isla de Lobos cuyo farero tiene una Expresso o como a La Graciosa donde su gente sabe que puede confiar en las carretillas sin que les dejen tirados.
Hoy soy yo, María O’Shanahan Otero, la tercera generación, la que coge la antorcha de Sitramo’s y la representación de Expresso en estas islas en medio del Atlántico. A la calidad y fiabilidad de las carretillas Expresso hemos añadido la modernidad con las carretillas sube- escaleras eléctricas alemanas CARGO MASTER de alta calidad y fiabilidad. Con ellas pretendemos dar soluciones modernas a problemas cotidianos como las escaleras. Los fabricantes fueron los primeros en crear las sube-escaleras eléctricas en Europa ya en 1982 y desde entonces siguen con sus productos estrellas al mismo tiempo que innovando. La modernidad llega también de la mano de la rapidez, razón por la que hemos creado nuestra nueva e-commerce website. Con ella pretendemos atender a nuestros clientes en un horario mucho más amplio como el que da la venta online. Clientes a los que tengo que agradecer que desde hace tantos años sigan confiando en nosotros y nuestras carretillas.
Esto no se hace solo, se consigue gracias a un equipo de gente que aporta el grueso a esta pequeña empresa. El señor Domingo Ruano comenzó a trabajar con mi abuelo con trece años y siguió formando parte de esta familia enseñándome mucho a mi hasta hace muy poco. Después de 61 años trabajando con nosotros decidió tomarse el merecido descanso de la jubilación con 74 años. Ahora se ha incorporado a esta familia, Yolanda Millán, una granaina con mucho salero que alegra la vida a todo el que entra por la puerta de nuestra tienda al mismo tiempo que eficientemente resuelve los temas administrativos que tan tediosos resultan implantando nuevos sistemas de facturación y contabilidad. Alberto Cabrera es nuestro pilar en Tenerife que, con el sosiego que le caracteriza, atiende a nuestros clientes tanto en la venta como en la reparación de las carretillas. Gracias a ellos, a este equipo tan maravilloso, podemos seguir aquí después de 50 años con un producto tan bueno y leal como nuestro equipo.